Este 30 de abril a las 2 de la madrugada un individuo abrió fuego con un rifle de asalto contra la embajada de Cuba en Washington, Estados Unidos. Según la cancillería cubana nadie resultó herido, solo se reportan daños materiales en el inmueble.
Los vecinos de la zona, al escuchar los disparos y gritos, informaron a las autoridades a través de la aplicación NextDoor, creada para estos fines. En apenas unos minutos la policía pudo capturar al sospechoso.
Según fuentes oficiales, el individuo portaba un arma de fuego AK-47 no registrada, municiones no registradas y asalto.
Horas más tardes el sujeto fue identificado como Alexander Alazo, de 42 años de edad y procedente de la localidad de Aubrey (Texas). Un informe policial sobre los hechos, citado por la agencia AP, señala que se trata de un «posible crimen de odio».
Inmediatamente las autoridades de La Habana criticaron el acto, al cual calificaron de terrorista y exigieron una explicación exhaustiva de lo sucedido a Washington.
El canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla convocó a la Encargada de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en La Habana, Mara Tekach, para exigirle el esclarecimiento urgente de los hechos y garantías de que ni se repitan ni queden impunes.
En una conferencia de prensa ofrecida a la mañana del siguiente día, es decir, hoy 1ro de mayo, el ministro de relaciones exteriores cubano dijo que
…una agresión como esta contra la Embajada de Cuba en los Estados Unidos, en cualquier caso, ha sido alentada por la creciente retórica hostil contra nuestro país, en la que están involucrados de forma pública y sistemática, tanto el Secretario de Estado de los Estados Unidos, como altos funcionarios de ese departamento a cargo de las relaciones con el hemisferio occidental, incluso la propia Embajada de los Estados Unidos en la Habana.
Rodríguez Parrilla dijo que no era posible disociar un hecho como este del recrudecimiento de la política de agresión y hostilidad que aplica el gobierno de los Estados Unidos contra Cuba; ni del endurecimiento del bloqueo, que incluye medidas no convencionales, incluso, durante la pandemia de COVID-19, que afecta a todo el planeta.
A la hora del atentado se encontraban en la embajada una decena de funcionarios. A estas hora ya varios estados han expresado su solidaridad para con Cuba.
Redacción Cuba Política
